Dejamos atrás el barbarismo
La cultura del vino en Europa es anterior a los romanos: en la Antigua Grecia, los poetas, historiadores y artistas ya elogiaban el vino. Dionisio, el dios griego del vino, representaba no solo el poder embriagador del vino cuando se abusa de él, sino también sus influencias beneficiosas y sociales. De hecho, según el historiador de la Antigua Grecia Tucídides:
«los pueblos del Mediterráneo empezaron a emerger del barbarismo cuando aprendieron a cultivar olivos y vides»
Celebramos la moderación
La vinicultura emergió en Europa con la expansión del Imperio romano en todo el Mediterráneo, cuando se establecieron la mayoría de regiones productoras de vino que todavía existen hoy en día. Incluso entonces, la producción del vino era un trabajo preciso que favoreció el desarrollo de distintas variedades de uva y técnicas de cultivo.
Aparecieron las barricas para el almacenaje y el transporte, se utilizaron las botellas por primera vez, e incluso se desarrolló un sistema de denominación rudimentario a medida que ciertas regiones ganaban reputación por su buen vino. A medida que se refinó la producción de vino, aumentó su popularidad y las tabernas de vino se convirtieron en una característica común en las ciudades de todo el Imperio.
La edad de oro del vino
Las técnicas de producción mejoradas de los siglos XVII y XVIII tuvieron como resultado mejores propiedades en el vino, se empezaron a utilizar las botellas de cristal con corchos y se inventó el sacacorchos. Fue entonces cuando despegó la industria francesa del vino, y los Países Bajos, Alemania, Irlanda y Escandinavia dieron un reconocimiento particular a los vinos de la región de Burdeos. Burdeos intercambiaba el vino por café y otros productos codiciados del Nuevo Mundo, lo que ayudó a consolidar el papel del vino en el comercio global emergente. Si bien el siglo XIX es considerado como la edad de oro del vino para muchas regiones, también tuvo su dosis de tragedia.
En 1863, muchas vides francesas padecieron una enfermedad provocada por la filoxera, que succionaba la savia de las raíces. Cuando se descubrió que las vides norteamericanas eran resistentes a la filoxera, se decidió plantar estas vides en las regiones francesas afectadas. Esto creó uvas híbridas que tuvieron como resultado variedades de vino incluso mejores.
El vino hoy en día
Durante los últimos 150 años, las prácticas en la producción del vino han vivido una revolución total como arte y ciencia. Con el acceso a la refrigeración, las bodegas han podido controlar más fácilmente la temperatura del proceso de fermentación y producir vinos de alta calidad en climas cálidos. La introducción de las máquinas de recolección ha permitido a los productores incrementar el tamaño de sus viñas y una mayor eficiencia. Aunque el sector del vino se enfrenta al reto de satisfacer las demandas de un mercado creciente sin perder el carácter individual de sus vinos, la tecnología les ayuda a proporcionar un abastecimiento consistente de vinos de calidad. La apreciación moderna del vino rinde un homenaje al arte atemporal de la elaboración de vino y demuestra su importancia en la historia y la diversidad de la cultura europea y mundial.